“La música, ese vínculo esencial” Entrevista a Maxi Carranza.
En la gacetilla de presentación de Mucho más que rock and roll, su segundo libro, el autor es descripto como “Reincidente por vocación, pasión y perseverancia”. De allí que este ejemplar que recién ve la luz continúe la línea de su primer libro. Maxi Carranza es el autor en cuestión y el prólogo de su nuevo libro está a cargo de Carlos Rolando, a quien Maxi presentará también en esta entrevista.
Carranza, inquieto buscador de notas que toquen las fibras mas íntimas, es un experto en el arte de encontrar en el detalle la fuente de inspiración y de esta manera, ofrece a los lectores una experiencia en cada una de sus entrevistas, crónicas o notas.
Maxi, también colabora con sus textos en nuestra página, es parte de este árbol entonces perdemos un poco de objetividad al presentarlo, por supuesto, porque admiramos su persistente trabajo, sin prisa pero sin pausa, de ir dejando una huella indeleble en el universo cultural de la ciudad y del interior provincial. Aprendemos mucho de música leyendo sus notas, descubrimos que podemos revivir, años después, un recital, un concierto, un evento, una gira. Maxi es el referente indiscutido de la música local. Lo que él sabe y tan generosamente comparte, forma parte de un acervo cultural que no para de crecer. Disfruten ustedes, queridos lectores, de esta entrevista al gran comunicador Maxi Carranza.
– Cuál es la gratificación más grande desde tu rol de comunicador: la preparación/producción de las notas, el momento mismo de realizarla o el verlas publicadas?
-Respecto al libro que es lo que más disfruto? Si la preparación, la realización o el ver la nota publicada. Yo creo que es una unidad, es como un combo por así decirlo y que cada etapa tiene su particularidad y su disfrute, primero encontrar una nota, más allá de las que están impuestas en los medios en donde uno colabora, después el desarrollo es como sumergirse en una montaña rusa, que ahí viene la mejor parte que empiezan a salir las relaciones, o los descubrimientos o hallazgos; la articulación con temas que por ahí uno no tenía previsto y cuando la estás escribiendo te das cuenta que lo podés vincular con algo local, sobre todo en mi caso que hago notas acá en Río Tercero, y después, sí, es una satisfacción verla publicada a la nota y también una sorpresa en el caso, como el mío que siempre he sido colaborador externo, de ver como queda diagramada, el diseño, la foto, el tipo de letra, ilustración si la hubiera, Así es que bueno, es un todo.
Por otro lado, con respecto a la portada que puede llamar la atención, yo quería que el título dijera Rock and Roll y estuviera la figura de Atahualpa Yupanqui, un dibujo de Mario Olmos, porque en este segundo libro hay bastantes notas de folklore, si bien lo principal es el rock, pero en relación al primero hay más notas del género folklórico, tanto a nivel local como ya a nivel más nacional, entonces me pareció que ahí terminaba de cerrar el concepto. Aparte Yupanqui es el más rockero de todos los folkloristas e incluso más rockero que muchos de los rockeros que conocemos. Además el dibujo original de Mario tiene una guitarra eléctrica y una guitarra criolla, en realidad es un viejo dibujo, que salió cuando tocaron los Divididos en el Cosquín folklore, es un dibujo que tiene ya varios años, que generó todo un revuelo en su momento, porque si bien ya había estado Charly que es rockero, estuvo como invitado de Mercedes Sosa, no como número central, el primer grupo masivo que causó mucho impacto fue Divididos. Yo hice una nota (para el diario Tribuna) y Mario hizo la ilustración, porque el escenario del Cosquín Folklore se llama Atahualpa Yupanqui, entonces lo rescatamos de un viejo dibujo de Mario y terminó siendo la portada de este libro que creo fue un acierto.
–En esta segunda edición ¿presentas todas notas que vieron la luz previamente en otros medios o también encontraremos textos inéditos?
-Sí, hay una nota inédita, bueno es que siempre tiene que haber algo no publicado, ya sea una nota, ilustración o foto. En este caso yo había hecho la nota sobre el grupo Dinosaurios en el siglo de las máquinas y puntuialmente ellos le dedicaron una canción a Chiche y me pareció que tenía que estar el mural Antonito, que yo estuve cuando lo inauguraron y por cuestión de tiempo no pude hacer nota pero estuve presente, éramos 15 nada más, tocó Darío Comba, hizo la canción Antonito de Paco Ferranti y dije, bueno si estaba el Chiche tenía que estar Antonito con el mural, entonces hice la nota y le puse El ángel de la Terminal de ómnibus de Río Tercero. Con respecto al Chiche, no sé como buscando llego a Alejandro Cerutti que tenía una serie de fotos sobre Chiche y cuando miro su página veo que hay una foto que es la que finalmente está en el libro donde está Chiche en el Bar Avenida, del que era un clásico habituéy está tomando café con leche y la canción de los dinosaurios nombra que él está tomando café con leche. Y fue muy curioso porque con Alejandro tenemos la misma edad pero nunca nos habíamos cruzado.
El tema es que conseguí su teléfono, lo llamé, le pedí si me podía autorizar a usar esa foto de su serie y me dijo que sí, sin ningún problema muy amablemente y también terminó cerrando con la nota de Chiche con la foto de una grande, un consagrado de la fotografía de Río Tercero a nivel internacional como Alejandro Cerutti más la de Antonito y su mural.
-De la escuelita (tal como se le decía a la Escuela de Ciencias de la Información, hoy Facultad de Ciencias de la Comunicaión) que cobijó tus días de estudiante a la Facultad en la que hoy se convirtió hay un abismo. ¿Sentís un proceso similar en tu escritura?
-Bueno sí hay un abismo infinito entre la escuelita que yo iba, no existía ni el auditorio cuando yo egresé, o sea que el hecho de que hoy sea Facultad, de hecho, hace un tiempo fui invitado a una charla, dije Escuelita y no les gustó mucho y tuve que aclarar que era una forma cariñosa. No se si ha evolucionado, uno también va teniendo más experiencia y también, esto para recalcarlo, que la importancia, principalmente en gráfica y sobre todo a nivel local y provincial no se estila tanto el tener correctores o editores, de hecho los diarios ya no tienen o tienen cada vez menos; en mi caso tengo la gran fortuna que más allá de la escritura en la que uno siempre intenta crecer, a veces es tiempo y hay que sentarse y parar la pelota en el trajín cotidiano que eso es lo más difícil de todo, en mi caso la editora y correctora es Érica (su esposa) ella la tiene muy claro, ha tenido un doctorado, un posdoctorado, entonces por ahí tengo una mirada que, en el vértigo de hacer una nota se te pasan cosas simples y ella es fundamental. Por ejemplo una vez me compré un libro con las mejores notas de la revista Rolling Stone en su historia y para este libro el editor volvió a cambiar muchas cosas de las notas originales que a mí en un principio me chocó pero después me ayudó a entender como era esto de la reescritura, de que nunca nada está cerrado; y volviendo a mis notas, al hablar de ese tema, prácticamente no las he tocado, sí algunas cuestiones gramaticales que por ahí se me pasaron en su momento pero la idea era dejarlas lo más fielmente a como fueron escritas. Solo cambié los errores en nombres de canciones que puede haber pasado o algún error así pero nada más.
–Al momento de armar un equipo de trabajo supiste acudir y referenciar a tus coterráneos en la ilustración y en la edición. ¿Es una manera de reivindicar el interior del interior?
-Sí, de alguna manera es eso, no sé si exactamente reivindicar sino también pintar la aldea, por eso quería que estuviera el Mario (Olmos) como sigue ilustrando, que es de barrio Norte de Río Tercero, Darío Falconi que si bien está radicado en Villa María con su editorial, es oriundo de barrio Cerino de Río Tercero, todavía tiene familia acá, y bueno también remarcar el prólogo de Carlos Rolando, un referente a nivel provincial y del interior del país en lo que es periodismo de rock. De hecho el fue el coordinador de dos libros, logró que la editorial de la Universidad Nacional de Córdoba editara libros de rock. Ya sacó dos y va para un tercer volumen, así que fue un honor y me sentí muy representado con lo que él dice, volviendo a este tema rápidamente, por ahí pareciera que nos hemos transformado los periodistas de rock, en reproductores de gacetillas, por que es lo que mayormente hacemos, no hay una reelaboración, ponerle un condimento propio, porque el vértigo de las redes nos lleva a esto, que pasa la gacetilla prácticamente derecho y no hay otra cosa. Una anécdota: le di el libro a Alejandro Orlando, de Los Modernos, que él es un hijo adoptivo de la ciudad ya que tiene familia y pasaba los veranos acá, y él me dice “Maxi quedé en orsai en un montón de notas y eso que yo conozco mucho de Río Tercero” y bueno creo que ese es un poco el objetivo del libro, que las notas que lean ahí no estén en ningún lado, que sea pintar la aldea, de alguien de acá que intenta transmitir un poco de lo mucho que se hace en Río Tercero.
–Entre la docencia, la escritura y la radio ¿cuál de los 3 espacios te enamora más?
-Particularmente yo me defino como un periodista de gráfica, si bien soy un oyente sin cura de los medios radiales, soy un fanático de la radio, más que todo como oyente. De los que se llevan la radio a todos lados dentro de la casa. Pero empecé en gráfica y como digo soy de la lapicera más que de otra cosa.
-¿Porque el ámbito cultural y porque la música?
-Después el tema musical familiar, sí tiene que haber algo ahí: mi abuela aparte de ser docente, profesora de música, mi tía también profesora de música y directora de coros, o sea que uno se crió en ese ambiente de los ensayos corales, de las actuaciones, de los viajes, también pasé por el conservatorio para estudiar guitarra que nunca más la agarré, mi madre es recibida de profesora de violín, aunque nunca ejerció entonces bueno, eso está dando vueltas y de alguna manera lo que se hereda no se roba.
– ¿Se viene un volumen tres o pasamos a otro tema?
-Sí, la idea es cerrar algún día la trilogía porque quedaron por una cuestión de costos, varias notas afuera que ahora me arrepiento, pero en ese momento ya no daba para sumar más material al libro, así es que sí, material hay, tanto notas como dibujos del Mario han quedado, por lo que en algún momento se cerrará esta trilogía.
Mucho más que Rock and Roll puede conseguirse contactando al autor en su Instagram: @maxi.carranza.718
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