Al natural. La profunda conexión con el Arte de Andrea Molina
Cordobesa de nacimiento y crianza pero riotercerense por elección de un camino que la llevó a conectar con lo más profundo de su ser. La naturaleza y el contacto con la tierra como la guía de su permanente búsqueda. La familia que formó, que junto a los amigos, son la trama que se suspende por debajo de sus pies. Porque Andrea levita, se eleva y camina y va dibujando, grabando, creando, sonriendo.
Desde El Árbol Cultura queremos homenajear a los artistas plásticos en este 21 de septiembre que es su día y lo hacemos en y con ella, que eligió esta ciudad que hoy la elige también. En esta entrevista conocemos un poco más de Andrea Molina, dueña del proyecto «Dulce Encuadernación», fan de los libros de artistas y de los libros en general. Amante de la poesía y de la sutileza del blanco que tan presente está en sus obras. Creadora junto a su compañera y amiga Carolina Pittinari de «Lo próximo. Taller de autopublicación» y también del proyecto «Montesinas» junto a su también amiga y colega Jimena Salomone, con quien fusionan el amor por la naturaleza, y su exploración, con el arte como manera de expresión.
Andrea habita un espacio tiempo que es mágico y a su alrededor papeles, y tijeras, y letras y punzones. Su hijo corre y la inspira, su compañero la contiene, sus afectos la admiran y saben devolverle la misma magia que ella entrega. Vamos entonces a conocer más de Andrea, que la disfruten y a todos los artistas plásticos, nuestro más sincero homenaje en su día.
¿Cuando nace tu pasión por las artes plásticas? Cómo fue que decidiste estudiar esa carrera?
Bueno empecé a estudiar Bellas Artes por azar podría decir. Siempre de chica me gustó mucho dibujar, hacía muchas manualidades, era muy prolija, me concentraba mucho, era una tarea que me encantaba hacer pero nunca lo había visto como una posibilidad, un destino o una carrera- Desde chica fui muy estimulada por mis padres, me mandaron a un taller de dibujo pero cuando tuve que elegir una carrera me anote en arquitectura que siempre era lo que yo decía que iba a ser, una arquitecta. Hice el cursillo de ingreso, entré y salí corriendo de ahí y me fui anotar en la escuela de bellas artes escuelita Figueroa Alcorta que en ese momento estaba en la calle Salta como para pasar ese año. Entré con esa idea y nunca más me fui.
Qué aspecto de las artes te atrajo más? El dibujo? La pintura? El grabado, collage? Otro?
Siempre me gustó muchísimo el dibujo, no tanto como soporte o como boceto sino como una técnica muy fundamental y qué tiene muchos lenguajes posibles, muchas formas posibles, así que siempre me sedujo digamos esa disciplina del dibujo. El collage también por trabajar mucho con papel. Me encantan los papeles y esa es una técnica que se hace básicamente con papel y con otras cosas además pero me gusta más esa parte, La pintura en eso del color mis paletas, mis obras tienen como un color muy reducido siempre tienden como al blanco, a la hoja de papel, no tengo muchas obras coloridas o explotando o explorando el uso del color. Bueno y el grabado es una de mis técnicas favoritas, disfruto mucho de hacerlo, me encantan las técnicas de reproducción y y bueno en todos los aspectos no? mezclándolo con lo utilitario, el arte utilitario aplicado a telas, a prendas, a estampas que un poco se escapan del universo artístico y se mezclan con la vida cotidiana; esas obras me fascinan, me encanta hacer matrices, pensarlas, me seduce mucho el grabado.
Una vez recibida ¿cambió tu percepción del arte respecto a la que tenías de estudiante?
Cuando terminé de estudiar, supongo que esto para en muchas carreras, hay como un vacío muy importante. Primero es algo feliz por haber terminado una carrera por ser profesional y después la incertidumbre de todo lo que viene. En ese momento recuerdo que no quería ser artista, que me cuestionaba muchas cosas y de a poco me fui cambiando esa perspectiva y esa visión un poco tomando norte, como una filosofía de vida. Entonces se amalgamó bastante bien a mis cambios a lo largo del tiempo y y siempre recurro y cambió mi manera de pensar sobre el arte. Me gusta mucho mirar, curiosear otros procesos de otros artistas pienso que es como contagioso el arte no? es como un disfrute personal, un goce estético ver trabajar a otras personas con materiales, todo lo que se puede lograr y bueno particularmente me gusta después probarlo, hacerlo. Me considero una eterna estudiante toda mi vida voy a ser una estudiante, una estudiosa del arte, de la cultura. Me gusta cuestionar y actualizar contenidos, nuevas formas, nuevos procesos, me parece que el arte permite eso, como viajar hacia el pasado, hacia el futuro, vivir el presente, es como una mezcla: la inspiración de grandes artistas del pasado, con la innovación de artistas contemporáneos, el uso de las tecnologías, nuevas posibilidades eso me parece muy estimulante para seguir estudiando, para seguir investigando, para seguir reflexionando sobre el arte.
Te inclinaste hacia la encuadernación y la auto publicación, que te llevo a ello?
El formato libro me parece que tiene más llegada, tiene como una vinculación entre las técnicas de reproducción, lo que se ha grabado con lo hecho a mano, con el cosido, con los hilos, con los papeles. Me parece como un formato accesible, me gustan las obras que se pueden tocar, que se pueden manipular también pensando que es muy frágil no? el libro. Manipular digamos una pieza, un libro de artista es como exponer digamos todos los sentidos. la vista, el tacto, entonces me gustan mucho esos formatos de libro que buscan como cierta intimidad y una experiencia personal.
En la actualidad ¿Quiénes son tu inspiración en el aspecto creativo?
Bueno en la actualidad mis inspiradores son mi familia y mis amigos, mi hijo sobre todo. Mis amigos y amigas que con los cuales hablamos de arte, sobre procesos, sobre poesía, sobre técnicas, porque me ayudan a mirar el mundo y me ayudan como a pensar creativamente. Y después sí, tengo muchos referentes del mundo del arte, trato siempre como de mirar artistas locales, un poco por la cercanía de poder haber sido alumna, haber ido a una muestra en vivo y en directo- También me inspiran muchas personas que escriben, me gusta mucho leer y bueno te podría nombrar algunos artistas que también son ilustradores Lucas di Pascuale, me gusta mucho Rosita González también, Mariana Robles, del universo del encuadernación Marías Steibel, Mónica Taján, Sol Rébora; también me gustan los ilustradores esos que hacen la parte visual en los libros como Cecilia Afonso Estévez, Yael Frankel, bueno esas son las que se vienen ahora la mente pero tendría que pensar y hacer una listita.
Si tus alumnos de último año del secundario te piden que los aconsejes sobre estudiar artes visuales ¿Qué les dirías?
Si alguien me pide un consejo para estudiar bellas artes es un poco que se entreguen a la experiencia de disfrutar sobre procesos y materiales, es un modo de conocerse a uno mismo, de poder crear otro lenguaje, otra forma de comunicarse, que vivan la experiencia plena de poder meterse hacia adentro y explorar el universo personal autorreferencial, me parece como qué es una forma muy hermosa de conocerse el hacer arte.
¿En qué proyecto estás trabajando en la actualidad?
En la actualidad estoy abocada a la docencia qué es otra forma de crear. A la docencia del arte y la cultura en nivel inicial y secundario. Estoy como bastante abocada a eso, me parece un espacio para seguir estudiando, para seguir reflexionando, para devolver un poco a la sociedad de todo lo que he aprendido y aprender de mis alumnos que enseñan mucho, mucho sobre el arte y sobre el vínculo con el arte, sobre las nuevas miradas nuevas exploraciones y el disfrute sobre todo.
Por último ¿Cuál es tu definición de las artes plásticas y que es lo que no puede faltar en ese universo?
Siempre asocia la palabra plástica con la palabra flexible, como que se puede cambiar, que se puede modificar. Entonces es como una definición, en ese sentido podría ser: todo el arte que tiene una posibilidad de cambio, y que tiene un contacto directo con los materiales como una exploración desde ese lugar sensorial con los materiales, entonces pienso en esa definición y pienso que lo que no puede faltar a la hora de hacer artes plásticas es la entrega a la experiencia. Muchas veces nos quedamos en lo de la contemplación como espectadores y nunca intentamos no sé, dibujar, pintar, hacer cerámica, hay muchísimos lenguajes que usan los materiales tanto físico como virtuales qué permiten ese exploración. Y en esa experiencia visual y artística yo me quedo como del lado de la experiencia y del vínculo con los materiales para crear objetos y obras que se puedan no sé, disfrutarse. Por eso me gusta mucho el libro de artista el formato publicación me parece muy interesante.
En la actualidad como contaba, Andrea está dedicada a la docencia, pero también se encuentra incursionando en el mundo de la cerámica y acaba de dictar el taller Lo próximo, de autopublicación junto a Carolina Pittinari, en el 102 aniversario de la Biblioteca Popular J. J. de Urquiza. En el futuro próximo espera retomar Montesinas junto a Jime Salomone y entre las horas de clases, la familia y los proyectos, se la puede encontrar en su taller iluminada por un reflejo de sol que cruza la calle esquivando el cemento e irrumpe a la sala en la que Andrea se inspira y crea y deja una delicada huella en cada nueva obra.
Desde El Árbol Cultura admiramos su arte y es por eso que en ella saludamos a cada artista que lea esta entrevista que disfrutamos realizar.
La Foto de Portada de la nota pertenece a Jimena Salomone.
El Árbol Cultura – «Amamos lo que hacemos, trazando puentes»